¿Se pierde la garantía por instalar Linux? Una gran cadena de tecnología dice que sí
La cadena de tiendas Currys/Pc World en Reino Unido ha negado la cobertura por daños de la garantía de ordenadores de sobremesa, a aquellos usuarios que tras adquirir un equipo en sus establecimientos, habían instalado Linux en lugar del sistema operativo Windows preinstalado.
En numerosas ocasiones se ha debatido si este tipo de conductas favorecen el monopolio de una determinada marca o producto, y desde hace un tiempo, se vigila muy de cerca que en cualquier comercio, de electrónica y consumo en este caso, se cumplan las políticas y condiciones que aseguren la defensa de los derechos básicos de los consumidores que compran cualquier artículo en las tiendas. Puede ocurrir que en algunos casos de pequeños comercios, se fijen los límites de perder la garantía legal de producto por el mero hecho de modificar el sistema operativo, si bien este hecho sería recurrible y en la mayoría de casos se obtendría la razón, ya que los afectados suelen ser aquellos de sistemas menos comerciales, como Linux.
Polémica en Reino Unido tras conocerse que a un usuario que acudió a la gran cadena Currys debido a un problema en su ordenador de sobremesa, le fue denegada la garantía del producto por haber instalado Linux como sistema operativo del equipo en detrimento del software Windows que venía preinstalado cuando lo adquirió.
Indignación entre los afectados que se quedan sin garantía
Pero el caso resulta cuanto menos llamativo ya que por un lado estamos hablando de instalar un software de código libre a nuestra elección cuando por el mero hecho de sustituir a un sistema operativo preinstalado, no se está infringiendo ninguna legislación al respecto, algo que a todas luces suena débil como argumento para revocar una garantía. Pero por otro lado, porque la polémica ha saltado en una gran cadena británica con lo que la transcendencia del caso adquiere mayores tintes si la empresa decidiera actuar de manera similar con otros productos.
Algunos usuarios han confirmado este problema al que se enfrentaron al tratar de reparar daños en sus equipos cuando tenían instalado GNU/Linux incluso de forma simultánea a Windows. La explicación que recibieron de la cadena de establecimientos fue que ningún daño sufrido por el hardware sería cubierto por la garantía por haber manipulado las condiciones originales del producto. Ahora, los usuarios afectados solo les queda la vía de reclamar, esperando que las leyes de consumo de la Unión Europea les den la razón y la garantía de compra de sus ordenadores pueda ser restituida.