Sinde se gastó 1.800 euros en una fiesta con artistas horas antes de la votación de su ley
Ya conocíamos las presiones de Estados Unidos hacia el Gobierno español y su Ministerio de Cultura con el fin de impulsar una ley para cerrar páginas web. Ahora conocemos que la propia ministra González-Sinde trasladó la retórica de la industria cultural estadounidense a varios artistas famosos españoles. No parece que reparase en gastos a tenor de la fiesta que organizó para ello.
Según podemos leer en El Confidencial Digital, la ministra de Cultura, Angeles González-Sinde, fue una de las caras conocidas en una fiesta que se organizó en un conocido -y no precisamente barato- local madrileño. Al reservado de este establecimiento acudieron alrededor de 20 invitados junto a la política conocida por el impulso de una ley que ha tomado su nombre y que prevé el cierre de páginas web con enlaces externos a contenidos protegidos con derechos de autor.
El citado medio asegura que la factura de la cena subió hasta los 1.800 euros, lo que supone una media de 90 euros por comensal. El motivo de esta reunión y festejo no es oficial, pero coincidió con la primera votación de la Ley Sinde en el Congreso, que se celebraría tan sólo horas más tarde. Recordamos que la oposición tumbó el proyecto inicial en la norma antidescargas en la Comisión de Economía y Hacienda y que fue en el Senado, con el apoyo del Partido Popular y CiU donde la ley fue aprobada.
Los invitados criticaron a los internautas y políticos en contra de la ley
Entre los invitados al evento estuvo Alejandro Sanz. Casualidad o no, el cantante fue uno de los más críticos tanto con los políticos que rechazaron la Ley Sinde en un primer momento. Llegó a calificarles de «cobardes e hipócritas» y también insultó a los internautas que criticaban su postura asegurando que eran «talibanes de Internet«.
Otros famosos que acudieron a la fiesta fueron David Bisbal (últimamente conocido por el trending topic de Twitter sobre sus conocimientos de política y turismo) y Miguel Bosé. Este último también cargó con fuerza contra aquellos que no consideran la Ley Sinde como solución al problema de las descargas. «Desde aquí mi apoyo total e incondicional a la Ley Sinde. Ya era hora. Y de paso que conste mi vergüenza hacia todos aquellos políticos que intentan canjear nuestros derechos contra otros beneficios que nos lesionan profundamente. A ellos vaya mi desprecio«, afirmó Bosé.
El medio no aclara a cargo de quién corrió el convite, aunque no sería de extrañar que hubiese salido de las arcas públicas en una nueva medida desesperada por conseguir apoyos entre los famosos, como ya sucediese con algunos personajes relacionados con la industria cultural en la que se denominó «La cena del miedo«. La indignación ya es una realidad en la Red después de haberse conocido la noticia.