Continúa la batalla contra el intercambio de archivos por toda Europa. Uno de los países donde más controversia se ha generado al respecto ha sido Irlanda. Allí el operador Eircom avisó de sus intenciones a sus usuarios, a quienes ahora vuelve a advertir que si no usan su portal de descargas de pago y optan por el P2P verán cortada su conexión por un año.
Se reabre la polémica en torno a las descargas «ilegales» y las desconexiones de usuarios en un país europeo. En esta ocasión vuelve a ser Irlanda el protagonista, uno de los primeros donde los operadores alcanzaron acuerdos con la industria musical para proceder a las desconexiones de sus clientes en caso de detectar la descarga de contenido protegido con copyright.
En esta ocasión, según informa The Irish Examiner, el operador Eircom -uno de los primeros en amenazar a sus usuarios que procedían a descargar a través de P2P – ha asegurado que en caso de que éstos prosigan con sus descargas verán cortada su conexión por periodos de hasta un año «gracias a la implementación de un nuevo protocolo». Se verán afectados «aquellos clientes que deliberada y persistentemente infrinjan el copyright«, declaró su portavoz.
Gracias al acuerdo alcanzado entre el operador y la Asociación Irlandesa Discográfica (IRMA en sus siglas en inglés), ésta le ha facilitado cerca de 1.000 notificaciones de usuarios señalados por compartir archivos desde junio de este año. Las primeras notificaciones ya están en camino y tanto las discográficas como el operador dan una solución a aquellos que descarguen música: que lo hagan a través del portal que acaban de lanzar.
El nuevo portal ofrecerá acceso ilimitado a millones de canciones en streaming con varias tarifas que variarán en función del número de canciones que se pretendan descargar los usuarios. Por 6 euros mensuales se podrán descargar 15 canciones, mientras que por 13 euros al mes se podrá proceder a la descarga de 40 canciones. «Así proporcionamos a nuestros clientes un servicio sencillo, barato y legal único en Irlanda», defiende la compañía.
Este anuncio contrasta con la última decisión judicial en el país irlandés, donde un juez rechazó que los operadores se viesen obligados a desconectar a los usuarios ya que no existe una legislación al respecto tras la reclamación de un operador que se negaba a cortar la conexión a sus usuarios. «No aceptamos la piratería, pero tampoco se nos puede hacer responsables de lo que nuestros clientes hacen en Internet», argumentaba. Parece que en el lado opuesto se encuentran los clientes de Eircom, que podrían optar por cambiarse a otros que no les obligasen a contratar estos servicios bajo la amenaza de la desconexión.