Telefónica tendrá que pagar más de 10 millones de euros por obstaculizar a las filiales de France Télécom.
Según señala el diario económico Cinco Días, las operadoras acusan a Telefónica de perjudicar sus intereses y su imagen ante los clientes al retrasar la entrega de servicios mayoristas, lo que derivaba en un número muy elevado de lo que se llaman «desagregaciones incorrectas». Orange las cifra en cerca de un 14% del total, lo que significa que casi 14 de cada 100 solicitudes para dar de alta a clientes de ADSL que presentaba Orange a Telefónica daban problemas. Yacom se unió pronto a la denuncia con acusaciones y cifras similares. Esto provoca daños en la imagen de las operadoras y pérdida de clientes que no pueden ser provisionados y al final acaban volviendo con Telefónica.
La Comisión de Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha dado la razón a las denunciantes y por ello Telefónica tendrá que pagar. El regulador considera que Telefónica no ha aportado datos que permitan desacreditar lo denunciado por sus rivales e, incluso, que ha admitido algunos comportamientos. Por todo ello, la resolución de la CMT no se queda sólo en la devolución de dinero a Orange y Yacom, sino que exige también que Telefónica haga cambios en su actividad para que estos problemas no vuelvan a producirse.
Antecedentes de Telefónica
La mayor multa de la historia de 152 millones de euros fue impuesta por la Comisión Europea por abuso de posición dominante en el mercado de la banda ancha, aunque la CMT también ha multado en reiteradas ocasiones al exmonopolio. Denuncias de Orange, Ya.com y Jazztel han acabado con multas cuantiosas por trabar a sus rivales.