«El solitario» amenazó a una teleoperadora de ADSL por problemas de portabilidad
El delincuente más buscado de España, Jaime Jiménez Arbe, El Solitario también amenazó a una teleoperadora de ADSL. Era un sábado de la primavera de 2004, y la mujer, tras presentarse con su nombre y primer apellido, informó a Jiménez Arbe de que Telefónica aún tardaría unos días en liberar las líneas. La respuesta no se hizo esperar: «Eres una puta y una zorra y no sabes quién soy yo», contestó la voz al otro lado del teléfono. Sonia, que no quiere ser identificada, afirma que trabajando como teleoperadora es normal encontrarse con gente ofensiva, pero asegura que nunca, ni antes ni después, ha vuelto a toparse con un individuo semejante. «No era ningún macarra. Se expresaba perfectamente pero era muy frío y agresivo. Me dio muy mal rollo», cuenta en el diario 20 minutos.
Sonia recuerda que Jiménez Arbe le habló de la nave industrial que poseía en Pinto, la misma en la que la Policía se incautó durante un registro de moldes de escayola y máscaras de látex con las que deformaba su rostro para no ser reconocido en sus atracos.
Ella intentó dialogar con él de todas las maneras posibles, pero harta de recibir insultos y amenazas, optó por colgar el teléfono. La reacción de ‘El Solitario fue aún peor que al principio. Llamó unas 10 veces al servicio de atención al cliente para pedir el nombre y los dos apellidos de la teleoperadora, despotricando contra todo el que hablaba con él.
Ahora respira tranquila, pero reconoce que aún no se le ha quitado el susto del cuerpo. «Fue una experiencia muy desagradable ya que hablé con un asesino».
El trabajo del teleoperador
Muchas ocasiones, las personas que están detrás del teléfono se encuentran situaciones muy desagradables con clientes insatisfechos o agresivos. Siempre hay que ser paciente porque en el 99 por ciento de los casos la culpa siempre es de la empresa de telecomunicaciones y no de la persona que atiende el teléfono.