Las impresoras 3D han alcanzado un importante nivel de relevancia en muy poco tiempo. Su éxito es innegable y la creciente demanda obligará a duplicar la fabricación de este tipo de dispositivos antes de que finalice el año. La producción mundial se dispara principalmente en las máquinas orientadas al sector doméstico, donde se catalogan todos los modelos que cuestan menos de 100.000 dólares, unos 70.000 euros.
Con este aumento de la fabricación, las impresoras 3D alcanzarán las 56.507 unidades antes de 2013. Las importantes innovaciones en este campo y el descenso de los precios se unen a la demanda creciente. El aumento será todavía mayor en 2014, año en que se espera que el sector crezca un 75% más hasta que la producción llegue a las 100.00 unidades. El 2015 se mantendrá esta tendencia. Los datos han sido publicados por la consultora Gartner, quien augura que sucederá “algo” grande que llevará las impresoras 3D de forma definitiva al hogar.
Los cálculos estiman que el gasto en esta tecnología se situará en 412 millones de dólares. En 2012 el gasto se estableció en 288 millones de dólares. Los consumidores invertirán un total de 87 millones de dólares y las empresas la cantidad restante. En 2014, la inversión crecerá por encima del 650 millones de dólares, tanto a nivel doméstico como empresarial.
Los expertos consideran que el mercado de las impresoras 3D ha alcanzado un punto de inflexión. En los próximos 18 meses, los consumidores pasarán de tener mera curiosidad por la tecnología a decantarse por la compra de una de estas máquinas, ya que habrán encontrado un motivo que justifique el desembolso económico. Creen que el uso de esta tecnología se extenderá a gremios como la arquitectura, la medicina y la joyería, e incluso el ámbito militar.
El factor decisivo para la popularización de las impresoras 3D será el precio, que ha bajado de forma significativa en los últimos 5 años. La competencia y el volumen más alto de fabricación posibilitarán un descenso del precio. Gartner espera que en 2015, siete de las mayores multinacionales del mundo comercialicen impresoras 3D.