El consumo de series a través de Internet se ha disparado en los últimos años. El P2P y portales de streaming alojan prácticamente los capítulos de todas ellas, aunque no todas tienen el mismo tirón. En función a las descargas por estas vías Netflix decide apostar por unas u otras para su catálogo según ha reconocido recientemente.
La denominada «piratería» no escapa al análisis por parte de sus competidores directos, las plataformas como Netflix. Aunque desde la industria cultural y del entretenimiento se insiste en el discurso del mal absoluto que suponen las descargas vía P2P o por otros medios que no compensan a los titulares de derechos de autor, lo cierto es que en muchos países es la única vía para el consumo de estos contenidos. Esto sucede en España, donde la oferta legal al estilo del citado portal aún está por despegar.
Precisamente este portal, el cual triunfa en países como Estados Unidos o Reino Unido a base de ofrecer una tarifa plana de películas y series, ha reconocido que estudia el fenómeno P2P para mejorar su catálogo. Según ha declarado Kelly Meryman, vicepresidente de la división de contenidos de la compañía, Netflix analiza qué series son las más descargadas en redes como BitTorrent para decidir cuáles introduce en su oferta.
«En la compra de series, nos fijamos en lo que va bien en los sitios de piratería«, admitió Merryman. A partir de ahí, la empresa estadounidense contacta con los propietarios de los derechos de autor para integrar dichas series a su catálogo y facilitar el acceso a los usuarios. «Netflix es más fácil de usar que la descarga de torrents porque no tienes que trabajar con los archivos ni descargarlos. Solo basta con pulsar y ver», señaló su CEO, Reed Hastings, en una entrevista.
Sin la llamada oferta legal en España
De este modo, logran incluir en su oferta las series del momento y hacer atractivo su catálogo, una estrategia que por distintos motivos no se sigue en países como España. El ejemplo de la serie de moda Breaking Bad evidenció este problema en nuestro país. Su disponibilidad online en el estreno de su última temporada solo llegó mediante P2P ya que ninguna plataforma de la industria la ofreció en la Red, lo que les acaba restando interés por parte de la comunidad de usuarios. Netflix, en cambio, es consciente del efecto negativo de la nula disponibilidad, que directamente resta demanda a su servicio por lo que se han visto forzados a tomar una solución.