Nintendo reconoce que la estrategia de lanzamiento de Wii U ha sido fallida. Así lo reflejan sus bajas ventas y el poco apoyo por parte de terceras desarrolladoras a su último hardware. Por este motivo, la compañía anuncia un cambio de rumbo de cara a los próximos meses.
Ha pasado menos de un año desde que se lanzó Wii U y los resultados hablan por sí solos. Apenas se han contabilizado 3,1 millones de unidades vendidas de la consola e incluso en los últimos meses ha vendido menos que su antecesora lanzada en 2006, Wii. A ello hay que sumar el progresivo abandono por parte de las denominadas third parties, los estudios ajenos a Nintendo, que rechazan lanzar sus juegos en esta plataforma por la poca aceptación entre los usuarios.
Como leemos en Gamerzona.com, el presidente de la compañía, Satoru Iwata, ha reconocido los fallos que han tenido en su irrupción en el mercado. Juegos poco imaginativos, falta de nuevos proyectos propios y meras conversiones de las desarrolladoras que no explotan las posibilidades de la consola son vistos por Iwata como principales motivos de la falta de punch en el mercado de Wii U.
«Como terceras compañías, intentan cuidar su propio negocio y tienden a no investigar en una consola con poca presencia. Intentaremos que vean a nuestra consola como un plataforma con la que pueden sacar beneficios», explicaba respecto a los estudios que como Electronic Arts han anunciado que dejan de lanzar juegos para la segunda Wii. No obstante, algunas de las firmas que siempre se han mostrado del lado de Nintendo con este proyecto como es Ubisoft empiezan a dudar, como demuestra que no vaya a haber una secuela de Zombie U, uno de los pocos juegos que sí supo explotar las características del GamePad.
Asimismo, Iwata avanzó que habrá nuevo software tanto propio como de terceras desarrolladoras, aunque no concretó qué títulos no anunciados serán los que finalmente aterricen en la consola para darle un nuevo impulso. En este punto sorprende el debate con otro de los personajes de referencia dentro del gigante nipón como es Shigeru Miyamoto, creador entre otros del mítico Super Mario. En su opinión, no hace falta lanzar nuevas franquicias con distintos personajes, sino que hacen falta «nuevas y buenas ideas». De este modo, apuesta por que el fontanero, Link, Donkey Kong o Samus sigan apareciendo en las consolas de la Gran N, aunque sea protagonizando distintos tipos de juego.
Por último, el propio Iwata, a pesar de reconocer que no ha sabido llevar al éxito a la consola en sus primeros meses, confirmó que no tiene intención de dimitir. «Ahora no es el momento de centrarse en eso. Me gustaría que pensarais en la palabra compromiso, la cual ya usé anteriormente, por lo que tengo la intención de poner nuestros mejores esfuerzos en asegurar que conseguimos alcanzar este objetivo», señaló sobre su posible abandono.
Ahora bien, para la reflexión de la compañía debe quedar no solo la estrategia inicial seguida en el estreno de la consola. También debería analizar lo sucedido en los últimos meses y lo difuso de sus últimos anuncios. Su conferencia en el E3 2013 hace apenas un mes fue el ejemplo de una política poco concreta y nada innovadora respecto a los títulos que están por llegar en lo que resta de año. Así pues, cabría pensar que el anunciado «cambio de rumbo» con Wii U no se daría al menos hasta 2014. Veremos si no es ya demasiado tarde.