Continúan los problemas legales para Google aunque esta vez llegan por medio de una denunciada presentada contra su plataforma YouTube Kids por mostrar una selección de vídeos no aptos para los más pequeños de la casa. Este nuevo servicio de vídeos habría roto la normativa en cuanto a la publicidad y programación para niños y se enfrenta ahora a una denuncia en Estados Unidos.
Los niños están expuestos en YouTube Kids a una enorme cantidad de publicidad que sin los filtros adecuados puede resultar dañina para ellos. Así lo entienden los responsables de la demanda contra este servicio de vídeos de YouTube que ha sido interpuesta en Estados Unidos ante la Federal Trade Commission (FTC). Según algunos expertos legales del país norteamericano, la principal preocupación es que “los niños están expuestos a un chorro sin fin de contenido que puede no revelar que tiene ciertos tratos con fabricantes”, según ha manifestado Aaron Mackey, abogado del Instituto para la Representación Pública.
Esta práctica contraviene en sí misma la política de publicidad de YouTube y de Google, algo que se toman muy en serio desde las oficinas de Mountain View. De hecho en la propia página de YouTube Kids se advierte que los anuncios relacionados con productos como comidas o bebidas están prohibidos, pero esto habría sido violado por la propia Google en los programas que se lanzan en la versión para niños. Vídeos de cadenas de comida rápida o smartphones son algunos de los contenidos que asoman por dicha plataforma y se ha pedido a la FTC que regule la aparición de los mismos.
El servicio de YouTube Kids se lanzó en febrero para dispositivos móviles y con ello se pretendía filtrar buena parte de los contenidos que pueden encontrarse en la versión de la aplicación de vídeo en streaming YouTube sin que haya que pasar ningún filtro de control de edad para ser visionados.
Google ya ha rectificado otras veces por culpa de la publicidad
No es la primera vez que Google choca con los problemas legales respecto a la publicidad en alguno de sus servicios. El motor de búsqueda de la compañía de Mountain View se ha visto varias veces en el ojo de la tormenta por la publicidad de contenido sexual o el posicionamiento de webs de piratería, hechos por los que ha tenido que modificar sus políticas publicitarias para evitar mayores contratiempos.