Google, gripe y Big Data: conoce cuándo llega la gripe a tu Comunidad Autónoma
¿Sabías que el otoño – invierno de 2008 – 2009 fue uno de los más intensos en cuanto a actividad gripal? Al menos eso es lo que dicen los datos de Google. Efectivamente, volvemos a hablar de Google para ahondar en la información que la compañía tiene de todos los usuarios del mundo, su comportamiento… e incluso su salud. Con esta herramienta podemos conocer la evolución de la gripe.
¿Quién habló del doctor Google? No sólo lo utilizamos para buscar enfermedades en sus resultados según la introducción de síntomas, sino que también podemos conocer, gracias a la compañía de Mountain View, cómo avanza la gripe por un determinado país, y concretamente en España, según la Comunidad Autónoma. Además, tenemos información desde el año 2008, y los nuevos datos se van introduciendo día a día, casi en tiempo real.
Esta «maravilla», según cómo queramos verla, es posible gracias al Big Data y el estudio de enormes cantidades de información completamente anónima. Además, Google cuenta también con las tendencias de búsqueda de su motor, el tráfico según palabras clave y, evidentemente, todo esto etiquetado según la zona geográfica gracias a la dirección IP de quienes navegamos por Internet haciendo uso de su motor de búsqueda.
Estamos refiriéndonos a Google.org en su sección «evolución de la gripe», donde podemos ver cronológicamente el avance de la gripe con la intensidad según la segunda variable -siendo la primera la línea de tiempo-. Así, Google elabora año a año una gráfica midiendo, cada mes, la intensidad en la evolución de la gripe con niveles «mínimo», «baja», «moderada», «alta» e «intensa».
Por otra parte, nos permite consultar los datos de este año en comparación con los de todos los años anteriores (desde 2008 – 2009) al mismo tiempo, o bien sólo con respecto a un año. Como adelantábamos, podemos comprobar el estado de evolución de la gripe a nivel mundial, a nivel nacional, e incluso podemos comprobar las estadísticas de nuestra Comunidad Autónoma. Pero, cuidado, que no es infalible.